miércoles, 7 de mayo de 2014

LOS LIBROS QUE MARCARON MI INFANCIA

Echar mano de los LIBROS QUE FORMARON PARTE DE MI INFANCIA y volverlos a leer, disfrutando al máximo de sus ajadas hojas y portadas rozadas...  

Buscando las sensaciones que cada una de esas historias me provocaron... Con la ilusión de conseguir transportarme de nuevo a esos mundos de niña feliz, exactamente de la misma manera que entonces, y experimentar la dicha de comprobar que ahí siguen, esperándome, latentes en mi memoria como bálsamos reparadores, y cuidados paliativos de  esas pequeñas dolencias del corazón y el alma, que a veces van de la mano de una vida demasiado real para mí gusto...

Recuerdo, que en esos años había pocos libros a los que dejara de lado, era capaz de leer casi todo, con una avidez propia de una descubridora de tesoros e impropia de una mocosa... A veces, pienso que hoy, sería incapaz de leer muchos de aquellos textos, por falta de tiempo, por falta de ganas, porque ya nos los comprendería, por resultarme demasiado largos o antiguos, por ser presa inevitable de una selectividad, que por suerte o por desgracia va ligada a la edad, con la consiguiente ganancia de una personalidad definida y la de miles de perjuicios que nos hacen perdernos muchas cosas, seguramente muy buenas... 

Durante mi niñez leí grandes obras que me marcaron profundamente como "La Celestina", "El Quijote", "Rojo y Negro" de Stendhal, "Cien años de Soledad", "Guerra y Paz" de Tolstoi o "Requien por un Campesino Español" entre otros...

Sin embargo, hoy quiero hablar de aquellos textos infantiles que me hacían sentir feliz "con todas las letras" y que asocio a palabras, situaciones, momentos que provocan que una sensación de calidez recorra de arriba a abajo mi cuerpo, aun todavía, cuando siento frío y no es invierno... 

Comencemos...

¿Quien no ha leído a "LOS CINCO"?, durante mucho tiempo, pensé que la tal "Enid Blyton" era "UN TIO CON TODAS LAS LETRAS Y EN TODA SU EXTENSIÓN"
Recuerdo la cara de asombro que se me quedó cuando descubrí que era una señora con rizos aficionada a la palabra "Emparedado" con la que amenizaba todas y cada una de las aventuras de estos muchachos, que eran incapaces de resolver un misterio si no se habían comido antes unos cuantos de esos deliciosos "Emparedados, Emparedados, Emparedados con jugo de naranja y un buen trozo de pastel" 



¿Y la dulce niña CELIA?, traviesa, con una imaginación desbordante, locuela, muy yo... Mi momento favorito, era sin duda, cuando su tío, las monjas, sus padres descubrían el embrollo y todo el mundo pronunciaba la palabra mágica CRIATURAAAAA!!! ¿pero que has hecho?




Me enamoré de MICHAEL ENDE sin conocerle, contagiada de la magia gris de "MOMO" o de una "HISTORIA INTERMINABLE" escrita en DOS COLORES. ¿Quien no ha soñado con volar cuan Atreyu, agarrada fuertemente de los suaves pelos blancos del enorme dragón con cara de perro bueno, Fujur?






Quise ser tan fuerte como Loella, la niña convertida a la fuerza en adulta, pero al fin y al cabo niña, en la "HIJA DEL ESPANTAPÁJAROS"



 Podría estar años enumerando libros, pero finalizar con mi amiga PUCK esa guapa adolescente danesa que sacaba partido al máximo de su vida en un internado...



¿Y cuáles fueron los libros que os hicieron soñar de pequeños?

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